viernes, 18 de agosto de 2017

Barcelona la tengo llena de amigos y de amigas. De los de abrazar de vez en cuando y de los de abrazar en digital, que también es abrazar pero de lejos.

A Barcelona he ido unas cuantas veces, en realidad muy pocas. Fuimos señor AÍSA y yo de muy peques a uno de los primeros Salones del Cómic, y nos alojamos en una pensión regentada por una señora gallega que nos trató como una madre y que yo creo que igual se pensó que éramos pareja. Barcelona es, todavía me acuerdo, desayunar cruasanes y café con leche ahí mismo, al lado del Liceo.

Barcelona es, para mí, la Barcelona de Blanco y de Benejam, la que salía dibujada en las páginas de La familia Ulises y también la de Gallardo y Mediavilla, la de Makoki. Barcelona es la ciudad en la que pasaban las cosas que les pasaban a los personajes de los tebeos de Bruguera.

Después nos enteramos de que no, de que también Valencia y Madrid, pero Barcelona fue siempre (y todavía lo es) la ciudad en la que se hacían los tebeos, y con Barcelona no van a poder.

Un abrazo y mucho ánimo.

La imagen es de Joan Tharrats.

No hay comentarios:

Publicar un comentario