miércoles, 1 de febrero de 2017

En otro orden de cosas, hoy se cumple un año del cierre de Lupitas y centauros. Justo hace un año de aquel Perfect day que remataba una aventura más larga de lo que yo mismo esperaba, y de la que todavía me siento muy satisfecho (y hasta orgulloso).


Echo de menos a Lupita. Sigue ahí, latente, quizá atrapada en algún bucle temporal.

Mientras tanto, lentos pero inseguros, trabajamos en otras cosas. (Muy lentos y cada día menos seguros de nada.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario